ACERCA DE COMFOERT-IN
DISPOSITIVO DE INYECCION SIN AGUJA
Uso personal
El inyector de chorro Comfort-in es un dispositivo médico certificado por la CE y la ISO y registrado en la TGA para medicamentos con receta, por lo que es una solución práctica para el momento de la inyección. Este dispositivo de inyección sin aguja es libre de estrés, sin aguja y, lo más importante, ¡prácticamente indoloro!
Comfort-in es un sistema de inyección a chorro sin aguja, prácticamente indoloro y fácil de usar. Elimine el miedo, el dolor y el peligro de inyectarse medicamentos, suplementos, vitaminas, vacunas y más.
¿Quiere una alternativa a las jeringas con aguja? ¿Una solución más cómoda y tranquila para inyectar medicamentos y suplementos? Comfort-in es su solución para una inyección prácticamente indolora, en lugar de tener que soportar la anticipación y el dolor de una aguja.
El inyector a chorro Comfort-in es el inyector más versátil del mercado porque se puede utilizar para una variedad de medicamentos, vitaminas, insulina y más, y se puede utilizar para hasta 10,000 inyecciones, lo que lo convierte en el inyector sin aguja reutilizable más duradero que conocemos en el mercado.
La tecnología de inyección a chorro se ha estado desarrollando y utilizando desde la década de 1970, pero su adopción ha sido lenta y la tecnología era voluminosa y complicada hasta que apareció Comfort-in. Comfort-in es fácil de usar y hace que la inyección sea un proceso simple, seguro, sin estrés y prácticamente sin dolor.
Vea cómo Comfort-in se compara con otras tecnologías de inyectores sin aguja y compruebe usted mismo por qué Comfort-in es el inyector a chorro más versátil, fácil de usar y más popular de América del Norte disponible para el público.
Nos comprometemos a proporcionar tecnología de inyección confiable y sin agujas tanto a profesionales como a usuarios privados, ¡y no vamos a irnos a ningún lado!
Por qué estamos aquí para quedarnos con nuestro inyector a chorro
Quienes estén familiarizados con la tecnología sin agujas sabrán que en las dos últimas décadas, varias empresas de todo el mundo manifestaron su interés en desarrollar sistemas de inyección «sin agujas». ¿Qué ha sucedido con ellas? Algunas se declararon en quiebra y otras no pudieron satisfacer la demanda de suministro. Una vendió su tecnología de inyección a chorro a un gran fabricante de jeringas y agujas que la dejó en un segundo plano, otra a una empresa farmacéutica que exige receta médica y un uso y una disponibilidad limitados.
Nos enorgullecemos de cumplir con nuestro compromiso de seguir ofreciendo el producto Comfort-in al público en general y a los profesionales. No tenemos intención de vender a empresas de jeringas o agujas, ni a empresas farmacéuticas que restrinjan su acceso a este producto revolucionario.
La fobia a las agujas y la incomodidad que suponen las inyecciones constantes son una auténtica barrera para muchas personas que necesitan atención médica constante. Estamos aquí para ayudar a esas personas, sean cuales sean sus necesidades.
